Unicorn wars

 

Madres y padres del mundo, alejad a vuestros hijos de esta película porque bajo su apariencia dulce y adorable se oculta una bestia despiadada y cruel.

Unicorn wars es una película española de animación llena de referencia y simbolismo nada disimulados a la religión cristiana, con un fuerte retro-gusto a Antiguo Testamento. En ella vemos cómo el ejercito osito adoctrina a jóvenes reclutas para librar una guerra sin cuartel contra su más terrible enemigo: el unicornio.

Toda la historia gira en torno a dos hermanos, Azulín y Gordi, que junto a todo un grupo de inexpertos ositos guerreros, son enviados a una misión suicida para intentar salvar el Bosque Mágico. En él se enfrentarán a horrores nunca vistos, poniendo a prueba su fe, su coraje y la confianza tanto en ellos mismo como en el resto del batallón.

Con claras reminiscencias u homenajes a La chaqueta metálica y a Apocalypse now aliñadas, como digo, con ingentes cantidades de simbolismo cristiano Unicorn wars es un claro ejemplo de que se puede contar una historia terrorífica, cruel y despiadada, llegando incluso a rozar peligrosamente el gore bajo una apariencia treméndamente adorable. Me explico. 

El cine, tanto de animación como de imagen real, nos tiene acostumbrados a asociar cierto tipo de estética, de estilo, incluso de gamas cromáticas a unas ideas, sensaciones o emociones. Aunque tiene cierto componente subjetivo ya que para cada uno puede evocar cosas distintas, cada color suele tener un significado. De esta manera el amarillo suele asociarse a la enfermedad, la locura y la obsesión, el azul con el raciocinio, la calma y la pureza, el rosa con la inocencia, la dulzura, y la belleza, el rojo con el amor, la pasión, la violencia, la ira y el peligro y el morado con el poder, la fantasía, lo etéreo y lo místico. Estos son sólo algunos ejemplos de la vasta extensión de significados y colores del mundo pero estoy segura de que no os pilla de nuevas esto que os estoy contando.

Por supuesto, existen más recursos para definir a un personaje en la trama como sus gestos, su forma de hablar, su posición en los planos respecto al resto de personajes... Todo ello nos hace tener una idea más compleja y completa de su personalidad de la que podríamos obtener con simples palabras pero el color sirve para centrar la atención y favorecer el ritmo de la narración, pudiendo llegar a provocar un mayor impacto que acto representado en sí mismo. Dicho todo esto me toca petaros la mente como me la petó a mi esta película, donde aparentemente todos las paletas están invertidas respecto a los cánones establecidos por la psicología del color. 

Por un lado, los unicornios siempre aparecen representados en planos muy oscuros y sombríos, predominando siempre el negro como color principal, de hecho no encontraremos ningún unicornio de ningún otro color que no sea negro a lo largo de la película. Esto nos lleva automáticamente a pensar en el unicornio como el mal encarnado, seres diabólicos a los que hay que temer. 

Por otro lado tenemos a los ositos, seres adorables de grandes ojitos titilantes y vivos colores que inspiran amor, ternura y paz. Y por si fuera poco todos tienen nombres super cuquis como los que le pondrías a tu peluche favorito cuando eras pequeño. De esta manera nos encontramos como Azulín, Gordi, Coco, los gemelos Mimosín, Peludito, Achuchones como algunos de los soldados rasos de esta historia o el comandante Fluffy, el capitán Hocicos y el sargento Caricias entre los ositos más duros del Campamento Corazón.

Sin embargo, por mucho que estas ideas preconcebidas sobre colores, texturas y formas intenten hacerse un hueco a través de los recovecos de tu cerebro te encontrarás en un callejón sin salida al tener que admitir la realidad que ven tus ojos. Los ositos, en su práctica totalidad, representan los defectos del hombre como la envidia, la codicia, la avaricia, la mentira, el egoismo y la crueldad, mientras que los unicornios son las virtudes que conforman la otra parte del ser humano como la amabilidad, la bondad, el coraje y la generosidad. Unicorn wars narra una historia que no por conocida deja de ser interesante y entretenida de ver, sobre todo gracias a esa discordancia tan brutal entre lo que se está contando y cómo se está contando. 

No  puedo contaros nada más sin caer en el destripe máximo de la película, así que qué os parece si primero la veis y luego debatimos sobre las posibles metáforas y referencias de la película.

¡Honor, dolor y mimos para todos!