Cluck volumen II: fanzine de terror

 Hace unos días me hicieron llegar un producto que me ha gustado tanto que he querido compartirlo con vosotros. Se trata de Cluck un librito auto-editado por una gran artista por la que siento una gran admiración y respeto, tanto es así que estoy a un dibujo de Tom Hiddleston de convertirme en una grupi loca pero sigamos... 

Cluck es el volumen dos de una serie de fanzines que tienen como eje central las películas de terror, en este caso grandes clásicos del género con la antigüedad suficiente como para que los spoilers hayan prescrito ya como pueden ser El resplandor, El exorcista, The ring o It entre otras. La autora consigue gracias a ello poder hablar con una libertad total y de una manera distendida y satírica del argumento de la película y, al mismo tiempo, darnos su opinión sobre ella sin miramientos. Además incluye en cada descripción un pequeño bocadillo haciendo un resumen de los premios y nominaciones que ha sufrido la película, haciendo que el lector no se vaya sin una perlita de sabiduría. 

 

La autora no es otra que la asturiana Ainhoa Fernández Uría que pese a estar aún cursando sus estudios ha demostrado tener un enorme talento y un don natural para que la estética de sus dibujos sean elegantes y atrevidos. 

Cierto es que en esta edición artesanal he descubierto una nueva faceta, un nuevo estilo artístico de Ainhoa que no tenía el placer de conocer. Desde el hiper realismo que te atrapa hasta el estilo cartoon no existe dibujo suyo que te deje indiferente y si no me comprobadlo vosotros mismos. No tenéis más que pinchar en su nombre para acceder a su cuenta y ver todo de lo que es capaz.

Dejarme que os cuente un par de cosas más sobre Cluck. Se trata de una edición limitada y a la coleccionista que hay en mi le gustaría decir que tengo en mi poder el volumen I, desgraciadamente no es así. No cometeré el mismo error el año que viene, oh no. ¡Estoy deseando ver con qué películas nos sorprenderá! En el interior de este pequeño folleto encontraremos una serie de sorpresas para el lector, una especie de merchandising diseñado por ella como pegatinas sobre las películas de las que habla en Cluck y un póster tamaño A3. Tanto las pegatinas como el póster es aleatorio lo que personalmente me parece muy buena idea, porque consigue que te sientas como una niña pequeña abriendo un huevo Kinder para descubrir qué te ha tocado.

 

Sin embargo Ainhoa ha hecho muchas más cosas además de estos increíbles fanzines, como bolsas de tela personalizas o láminas con sus propios diseños, entre otras cosas. No me cabe la más mínima duda de que tendrá un futuro laboral brillante y que conseguirá todo lo que se proponga en la vida porque sería totalmente injusto que nos privada al resto de pobre mortales sin talentos artísticos, de su visión y su arte.