Drácula


Lo primero que tenéis que saber para disfrutar de Drácula, la nueva serie de Netflix, es que no tenéis que saber nada. Me explicaré mejor.

Si has leído la novela de Bram Stoker, bien hecho pero olvídala.

Si has visto la película Drácula de Bram Stoker de Francis Ford Coppola, olvídala.

Si has sufrido uno de mis resúmenes extendidos de la novela con comentarios de la lectora, enhorabuena porque están muy cotizados pero olvídalo también.

¿Estás enamorada de la interpretación de Gary Oldman como Drácula? Es más, ¿es oír la palabra "Drácula" y ver nítidamente a Gary con sombrero de copa y esas gafitas azules que a cualquiera le quedarían mal pero que a él le sientan de vicio? ¡Ay, amiga mía, no va a ser lo mismo!

Si por el contrario todo esto te es ajeno, enhorabuena, podrás disfrutar de la serie sin ningún problema. 

Antes he dicho que no iba a ser lo mismo y, efectivamente, no se parece a nada que hayas podido ver antes pero eso no quiere decir que sea malo. En cierto modo hacen su propia versión de Drácula y, tratándose de los creadores de la serie de Sherlock Holmes, no han podido evitar darle cierto aire detectivesco al intentar resolver los misterios que rodean al vampiro más célebre de todos los tiempos.

Por otro lado, visualmente es una obra de arte, un regalo para tus ojos. Al menos esa es mi opinión. El juego de colores y de planos es una pasada, incluidos los que evocan a aquellas maravillosas películas de los 80 de serie B o de V en este caso (perdón por el chiste malo, tenía que hacerlo).

En cuando a Claes Bang, el actor danés que da vida a Drácula. ¿Qué decir de él? No le conocía pero es puro oro líquido. Estoy deseando ver más cosas de él. 

Comentarios

  1. Gran sèrie, me encantó, y me encantó recomendártela junto a Jorge, insistir e insistir hasta que la viste. No os la perdáis. Umm la Música... Muy buen escogida!

    ResponderEliminar
  2. Yo no te quería robar instantes, yo te quería morder el corazón, hacerte vivir en mi devorando tu alma.

    Quería comerme tu sonrisa, hacerla mia, beberme tus lágrimas, digerir tus miedos, lamerte las heridas, matarte y darte mi vida a cambio.


    Vivir enredada en las conexiones de tus neuronas, arrasar tu piel con la electricidad de mis dedos, respirar tus aullidos, ahogarme en tu olor.

    Quería soñar lo que tú sueñas, regalarte la sal de mi piel, mis pechos, mis manos, mis labios y mis ojos.

    No, no sabes que es el Amor si nunca se te han roto las uñas trepando por la pared esperando una respuesta esquiva.

    Tampoco es Amor si conservas intacta la........ Etc etc.

    Tremendo guión, tremendisimo Coppola, fantástica historia de Amor de principio a fin. Gracias

    ResponderEliminar

Publicar un comentario

Introduce alguna sugerencia:

Entradas populares