Polo negativo


Ahí está otra vez.

Da igual cuánto tiempo pase, siempre acaba volviendo como el villano de una película mala.

Los síntomas se suelen repetir, solos o en compañía, eso da igual:

Esa presión en el pecho que te hace llevar la mano automáticamente al corazón, como si esperaras que dejase de latir en cualquier momento. Pero, es curioso, no sólo no se para, sino que repica con fuerza, con furia casi, por debajo de las costillas.

Esa sensación de ingravidez que empieza en la base del estómago y rápidamente se adueña de todo tu cuerpo dejándote sin respiración. 

El molesto zumbido en los oídos que hace que todo parezca distante e insustancial. No escuchas nada ni a nadie. Sólo ese rugido incesante al fondo de tu propio cerebro. A veces, incluso, giras la cabeza esperando encontrar a alguien justo detrás de ti pero no hay nadie, estás solo.

Esa voz que te dice todas esas cosas maravillosas no es otra que tu propia voz y te conoce mejor que nadie, sabe dónde dar fuerte, cuáles son tus defectos y virtudes, no le puedes esconder nada, él también estuvo ahí...

No hay manera de callarla para siempre o, al menos, no la has descubierto todavía. De momento sólo sabes la manera de ignorarla un día más.

Walk, come with me now
I'm going to take you down
Walk, come with me now
I'm going to show you how

Afraid to lose control
And caught up in this world
I've wasted time, I've wasted breath
I think I've thought myself to death

I was born without this fear
Now only this seems clear
I need to move, I need to fight
I need to lose myself tonight
Walk, come with me now

Comentarios

Publicar un comentario

Introduce alguna sugerencia:

Entradas populares